POLÍTICA Y VIOLENCIA EN OAXACA.


 

La violencia en Juchitán.

Hace unos días Juan Terán, presunto líder de una banda criminal en Juchitán, pronunció un llamado a la población para echar de ese municipio a los fuereños que se han apoderado de él.

En el discurso, dicho en zapoteco y cuya traducción fue transmitida por algunos medios, Juán Terán, quien fuera amenazado de muerte por los sedicentes miembros de los grupos delincuenciales “Antrax” y “Nueva Generación”, convoca a los juchitecos a organizarse en torno a él para expulsar a los fuereños del municipio. El discurso apela a la tradicional valentía del pueblo juchiteco para no dejar que personas extrañas sigan controlando sus vidas.

El llamado, en un zapoteco pobre en su construcción idiomática (emplea muchas palabras en castellano), sugiere una persona de una rudimentaria cultura étnica, pero sin duda nativo del lugar. Lo primero le rresta efectividad al discurso, lo segundo le da credibilidad.

Por otra parte, los supuestos grupos antagónicos a Juan Terán, también convocan a la población para que les den su apoyo. Los “Antrax” y “Nueva Generación”, alegan que meterán al orden a quienes han sembrado la violencia y el miedo en la región.

Ambos discursos tienen cierta similitud y es importante destacar el afán de legitimidad, misma que los contendientes quieren obtener mediante el apoyo popular. Esto no es nuevo en las estrategias de guerra de intervención, ganarse a la población es fundamental.

Es difícil anticipar si alguno de los llamados tendrá éxito, pero bien puede servir de justificación para desatar una ofensiva contra el grupo rival, con el pretexto de que se cuenta con el apoyo de un sector  de la población y así mostrarse como un líder popular, libertador y justiciero.

Esto recuerda la propaganda de la Familia Michoacana cuando quisieron presentarse como los defensores de las tradiciones culturales de ese estado.

Si Juan Terán o los “Antrax” y “Nueva Generación”, llevan a la práctica lo que hasta ahora han sido amagos, la región podría repdroducir, con una nueva modalidad, la emergencia de grupos de autodefensa como en Michoacán.Una modalidad diferente, porque ahora será un grupo criminal el que tomarán la iniciativa que,  de tener éxito, es probable que entonces sí se sumen algunos empresarios, propietarios, comerciantes y ganaderos que han sido afectados con los secuentros y robos y que están hartos de ser saqueados. La pregunta es quién de los contendientes saldrá victorioso en la primera batalla de esta guerra declarada.

Incluso es probable que algunos jóvenes puedan ser reclutados como mercenarios, con cargo a fondos con recursos de diversa procedencia. Lo anterior no estaría en contraposición con una larga tradición juchiteca de guerra de autodefensa.

El conflicto armado podría extenderse a las zonas de Matías Romero al norte, Salina Cruz Al sur,  e Ixtepec, Ixtaltepec y el Espinal al Noroeste, cuyas poblaciones también ha sido afectadas.

Hay muchos intereses y posibilidades económicas en la región que la hacen atractiva para varios actores, lamentablemente no con buenas intenciones.

 

Las elecciones en Oaxaca.

Por otra parte, las elecciones no parecen motivar la atención ni la participación de la población.

El pasado viernes 29 de abril, los candidatos contendientes ofrecieron al público un debate que no tuvo el éxito propagandístico que se esperaba, la población sigue igual de indiferente.

En una encuesta reciente, aplicada después del debate en algunos municipios de los Valles Centrales, que es la región que recibe sin problemas la señal televisiva de CorTV, el 69% afirmó conocer a los candidatos.

El 80% de la población representada en la muestra, afirmó que la elección del gobernador es importante; pero sólo el 72% dijo que iría a votar el 5 de junio; por otra parte, sólo el 28% de los entrevistados dijo haber visto el debate y de ese porcentaje el 68% sostuvo que fue aburrido.

En una estado donde la población afirma que las elecciones son importantes; pero sólo el 28% se asoma a ver un debate de quienes contienden en ella, todos los partidos pierden y en Oaxaca, parecen no darse cuenta.

 

El Primero de Mayo.

 

La participación y la conducta de los participantes en el desfile-manifestación de este 1º de mayo, confirman el estado de malestar social que existe en el país y particularmente en Oaxaca.

Por otra parte, los efectos combinados de la volencia criminal, lo que acontecen en Brasil, las protestas por la reforma laboral francesa, los atentados terroristas, todo ello trensmitidos a través de las redes sociales o los medios convencionales de comunicación, alientan la percepción de que las cosas están mal en México y que no respondemos como los ciudanos de otros paises.

Por su parte, la CNTE ha valorado positivamente los resultados del 1º de mayo y se prepara para su paro nacional el 15 de mayo. La respuesta de los resultados de las negociaciones SEP-SNTE, será importante en la articulación de la protesta de la CNTE y particularmente de la Sección XXII.

El escenario que se comienza a configurar en Oaxaca no es alentador, sobre todo si se considera que ni el gobierno federal ni el estatal, parecen apreciar lo grave que puede resultar la evolución de lo que hoy acontece. La inversión en materia de desarrollo social no tiene el impacto esperado en los estados más pobres de México, sobre todo en Oaxaca. Mientras tanto,  en la SEDESOL parece reinar la confusión.

Por otra parte, no se observa una movilización de las fuerzas del orden hacia la región del Istmo como si ha ocurrido con el caso de Guerrero. No se les debe olvidar que Oaxaca tiene tanto o  más potencial conflictivo que Guerrero y, como decía Don Jesús Reyes Heroles: problema que se soslaya, estalla.

 

 

 

 

Acerca de samael2012

Juchiteco, aficionado al cine, los viajes, los libros, la música. . . y los sueños.

Publicado el 3 May, 2016 en Artículos y etiquetado en , , , , , . Guarda el enlace permanente. Deja un comentario.

Deja un comentario